sábado, 4 de septiembre de 2010

Raimon Panikkar: Filosofía, Pensamiento y Religión. (en catalán)

La historia de un jóven con mal carácter

Su padre le dió una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la paciencia, debería clavar un clavo detrás de la puerta.
El primer día, el muchacho clavó 37 clavos detrás de la puerta.
Las semanas que siguieron, a medida que él aprendió a controlar su genio, clavaba cada vez menos clavos detrás de la puerta.
Descubrió que era más fácil controlar su genio que clavar clavos detrás de la puerta.
Llegó el día en que pudo controlar su carácter durante todo el día.

Después de informar a su padre, este le sugirió que retirara un clavo cada día que lograra controlar su carácter.
Los días pasaron y el jóven pudo finalmente anunciar a su padre que no quedaban más clavos para retirar de la puerta.
Su padre lo tomó de la mano y lo llevó hasta la puerta.
Le dijo "has trabajado duro, hijo mío, pero mira todos esos hoyos en la puerta. Nunca más será la misma.
Cada vez que tú pierdes la paciencia, dejas cicatrices exactamente como las que aquí ves."
Tú puedes insultar a alguien y retirar lo dicho, pero el modo como se lo digas lo desbastará, y la cicatriz perdurará para siempre.
Una ofensa verbal es tan dañina como una física. Los amigos son joyas preciosas.
Nos hacen reír y nos animan a seguir adelante. Nos escuchan con atención y siempre están prestos a abrirnos su corazón.


LOS AMIGOS SON JOYAS PRECIOSAS !!

¿Que es la riqueza?

A dos grupos de personas se les hizo la siguiente pregunta:
¿Qué es la riqueza?

El primer grupo contestó de la siguiente manera:

Arquitecto: Tener proyectos que me permitan ganar mucho dinero.
Ingeniero: Desarrollar sistemas que sean útiles y muy bien pagados.
Abogado: Tener muchos casos que dejen buenas ganancias y tener un BMW.
Médico: Tener muchos pacientes y poder comprar una casa grande y bonita.
Gerente: Tener la empresa en niveles de ganancia altos y crecientes.
Atleta: Ganar fama y reconocimiento mundial, para estar bien pagado.

El segundo grupo contestó lo siguiente:

Preso de por vida: Caminar libre por las calles.
Ciego: Ver la luz del sol y a la gente que quiero.
Sordo: Escuchar el sonido del viento y cuando me hablan.
Mudo: Poder decir a las personas cuánto las amo.
Inválido: Correr en una mañana soleada.
Persona con una enfermedad terminal: Poder vivir un día más.
Huérfano: Poder tener a mi mamá, mi papá, mis hermanos, y mí
Familia.

"No midas tu riqueza por el dinero que tienes, mide tu riqueza por aquellas cosas que no cambiarías por dinero"

Recordando nuestra conexión


Aparentamos vivir en la Tierra como seres diferentes con diversos destinos; pero tal y como cada gota de la lluvia es parte del océano, todos y cada uno de nosotros somos parte del Océano de la Conciencia, del Cuerpo de Dios.
Encontramos Amor y paz interior en las profundidades de la más alta Verdad que todos somos Uno, una Familia.
Deja atrás el equipaje del miedo, la envidia, y el resentimiento; vuela, vuela con las alas de la comprensión, para entrar en el Territorio sin fronteras de la Compasión.
Ah, no ser aislado, no a través de la insignificante partición fuera de la Ley de las Estrellas.
El interior – ¿qué es? si no un cielo encendido, repleto de pájaros y profundidad con los vientos del retorno a casa.
Rainer María Rilke.

martes, 31 de agosto de 2010

Conocerse a través de las experiencias


Siempre regreso a esta Reflexión de Neale Donald Walsch. Es maravillosa, y aunque parece complicada; es lo más simple que puedo entender acerca de nuestra realidad. Aquí la comparto:
“Has ingresado al mundo relativo, con el fin de poder experimentar lo que no puedes en el Reino de lo Absoluto. Lo que pretendes es experimentar es Quién Eres Realmente. En el Reino de lo Absoluto, puedes saberlo pero no lo experimentas. Tu alma desea conocerse a sí mismo por medio de experiencias. La razón por la que no experimentas ningún aspecto de Quien Eres Realmente en el Reino de lo Absoluto es porque, en este reino, no existe ningún aspecto que tú no seas.
El absoluto es justamente eso -el absoluto-. El todo de Todas las Cosas. El Alfa y el Omega, con nada en medio. No hay grados de “Absoluto”. Los grados son únicamente cosas que pueden existir en lo Relativo.
El Reino de lo Relativo fue creado con el fin de que puedas conocerte a ti mismo como magnífico, por medio de experiencias. En el Reino de lo Absoluto no hay otra cosa más que magnificencia, de modo que ésta “no es”. O sea, no se puede experimentar, no se puede conocer por medio de experiencias, porque no hay manera de experimentar la magnificencia en la ausencia de aquello que no es magnífico.
De verdad, tú eres Uno con el Todo. ¡Esa es tu magnificencia! Sin embargo, no puedes conocer la magnificencia de ser Uno con Todo mientras eres Uno con Todo, porque no hay nada más, de tal manera que ser Uno con Todo no significa nada. En tu experiencia, tú eres simplemente “tú”, y no tienes experiencia alguna de la magnificencia que implica.
La única manera en la que puedes experimentar la magnificencia de ser Uno con todo es si existe algún estado o condición en el que no ser Uno con Todo sea posible. Sin embargo, Todo es Uno en el Reino de lo Absoluto, lo cual finalmente es la máxima realidad; el hecho de que algo no sea Uno con Todo es imposible.
No obstante, lo que no es imposible es la ilusión de no ser Uno con Todo. Entonces, fue con el propósito de crear esta ilusión que surgió el Reino de lo Relativo. Es como un mundo de Alicia en el País de las Maravillas, en donde las cosas no son como parecen ser y en el que las cosas parecen ser lo que no son.
Tu ego es la herramienta principal en la creación de esta ilusión. Este dispositivo es el que te permite imaginar a tu Yo como algo separado del Resto de Ti Mismo. Es la parte de ti que te considera un individuo.
Tú no eres un individuo, sin embargo, debes individualizarte con el fin de comprender y apreciar la experiencia en su totalidad.”

Recordando nuestra conexión


Aparentamos vivir en la Tierra como seres diferentes con diversos destinos; pero tal y como cada gota de la lluvia es parte del océano, todos y cada uno de nosotros somos parte del Océano de la Conciencia, del Cuerpo de Dios.
Encontramos Amor y paz interior en las profundidades de la más alta Verdad que todos somos Uno, una Familia.
Deja atrás el equipaje del miedo, la envidia, y el resentimiento; vuela, vuela con las alas de la comprensión, para entrar en el Territorio sin fronteras de la Compasión.
Ah, no ser aislado, no a través de la insignificante partición fuera de la Ley de las Estrellas.
El interior – ¿qué es? si no un cielo encendido, repleto de pájaros y profundidad con los vientos del retorno a casa.
Rainer María Rilke.